Palau de la Música Catalana (visita interna): Obra del arquitecto Lluís Domènech i Montaner es un símbolo de la Barcelona modernista y un símbolo cultural de la ciudad. El edificio está construido sobre hierro forjado, con amplias vidrieras que hacen juegos de luces y en las que abundan las referencias a la naturaleza. Está considerado como “El edificio más modernista del mundo”, inaugurado en 1908, y declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1997.
Catedral de Santa Eulalia (interior o exterior) y la fachada del Palacio Episcopal:
La Catedral es uno de los monumentos más importantes de la arquitectura gótica catalana. Situada en la imponente Plaza de la Seo, marca la transición entre la zona comercial de Portal de l’Angel y el bello Barrio Gótico.
El Palacio Episcopal construido sobre la muralla romana en el siglo XII, fue en la Edad Media un edificio estrechamente vinculado a la actividad de la Catedral.
Plaza de Sant Jaume: situada en el corazón del Barrio Gótico, alberga el centro político, pues están los edificios del Ajuntament de Barcelona y el Palau de la Generalitat, sede del gobierno catalán.
Plaza Real (Farolas de Gaudí): Es la única plaza porticada de Barcelona, y está decorada con dos farolas de hierro forjado y bronce diseñadas por Antoni Gaudí en su época de juventud.
Palau Güell (visita interna): Está considerado como una de las principales creaciones de Gaudí, cerrando su etapa de juventud. El Palau Güell fue un encargo de su principal mecenas, Eusebi Güell, y era una ampliación de la casa que ya poseía la familia Güell. Es una obra plenamente modernista y catalogada por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad, en 1984. Gaudí aplico en ella algunas de las soluciones arquitectónicas que en su momento fueron revolucionarias.
Las Ramblas: es el paseo por excelencia de Barcelona, consideradas como el corazón de la ciudad. Un recorrido peatonal lleno de arte, bullicio y color que nace en Plaza Cataluña y finaliza en el mar.
Plaça Catalunya: es la plaza donde finalizan calles tan concurridas como el Passeig de Gràcia y el Portal de l’Ángel y es donde nacen, también, Las Ramblas. Es el punto de unión entre el centro histórico y el barrio del Ensanche.